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Leroy Merlin trae cuatro ideas y consejos para convertir la terraza en el rincón preferido a la sombra. Así, los toldos para terrazas o balcones son idóneos si se dispone de poco espacio. Se puede recoger cuando necesites más luz o quieras disfrutar del sol. Los toldos para el balcón se fijan a la barandilla para elegir la inclinación y no solo dar sombra, sino regular la cantidad de luz que quieres dejar entrar y protegerlo del viento o la lluvia cuando lo necesites. Los toldos para terrazas llevan un brazo extensible fijado a la pared para modular la inclinación (hasta 90º) y ganar estabilidad.
Entre las principales ventajas del toldo destaca que, no solo da sombra a la terraza, sino que también protege el interior, regulando la temperatura y reduciendo el consumo de energía dedicada a la calefacción o climatización. Ocupan muy poco espacio y puedes comprarlo en medidas estándar e instalarlo tú mismo (toldos en kit) o hacerlo a medida y personalizado.
Si quieres un plus de confort, puedes instalar un toldo motorizado para automatizar su funcionamiento, la opción perfecta para personas mayores o con movilidad reducida. Con un sensor puedes programarlo para que el toldo se recoja o extienda automáticamente si llueve, hace sol, viento excesivo o cuando llegue una determinada hora del día.
Si eres de los que prefiere una terraza soleada, es mejor colocar un parasol para poner a la sombra un área determinada: la mesa para comer, las hamacas o el rincón de la barbacoa. Puedes cambiarlo de sitio y abrirlo o cerrarlo según lo necesites. Se componen de un mástil (central o excéntrico) y de una vela de poliéster muy fácil de limpiar. Algunos modelos, además, incorporan una manivela para que sea aún más fácil abrirlo o cerrarlo.
Si, además, te gusta disfrutar de la terraza por las noches, los parasoles con iluminación LED central ayudan a crear rincones más íntimos en el exterior.
Las velas son piezas de poliéster triangulares, cuadradas o rectangulares que pueden fijarse a la fachada, árboles o colocando unos mástiles. Pueden combinarse y superponerse para ampliar el espacio de sombra y su variedad de colores y tamaños te ayudará a crear espacios más divertidos y atrevidos. Recuerda retirarla y guardarla cuando vuelvan las lluvias y el frío para conservarla en perfectas condiciones hasta la siguiente temporada.
La pérgola es una estructura de aluminio o madera que puede estar fijada a la fachada por uno de sus lados, a modo de porche, o ser completamente independiente. Con cubierta en la parte superior puede tener, además, uno o varios lados cubiertos para conseguir más sombra e intimidad. Las más tradicionales utilizan una lona de poliéster corredera, pero existen opciones con lamas sólidas orientables más resistentes que permiten regular la luz y temperatura.
La opción más innovadora es la pérgola bioclimática, también con lamas orientables con capacidad de regular el microclima del espacio acotado, dotándolo de una ventilación natural gracias a su sistema motorizado. Además, estas lamas son estancas, protegiendo también en caso de lluvia, y puede instalarse luz LED, por lo que son la mejor solución para los que quieran disfrutar de su terraza todos los días del año y a cualquier hora del día.