La logística se considera el proceso empresarial más estratégico en los próximos años ya que, además de ser una palanca para generar ingresos y una voz de coste muy significativa, genera sobre todo un impacto directo en la experiencia de usuario de los clientes. La correcta gestión de los flujos de bienes en un territorio pasa por fuertes inversiones realizadas para aumentar los niveles de servicio trabajando en la rapidez, fiabilidad y precisión de cada uno de los procesos.

Por este motivo, la filial española del Grupo FITT ha aumentado 2.500 m2 el área de almacén, que ahora cuenta con una superficie de 7.500 m2 y una capacidad de almacenamiento de 6.000 palet.

El área destinada a la preparación de la mercancía y al envío se ha duplicado: esto permite tramitar los pedidos de una manera más ágil y productiva. Las inversiones no se limitan a la superficie física, sino que incluyen también la actualización del software para la gestión de los productos.

El nuevo software permite reducir la probabilidad de error, tramitar los pedidos de una manera más rápida y eficiente y automatizar la gestión del stock, haciendo que los procesos de entrada y salida de la mercancía sean semiautomáticos. Desde 2019, el número de pedidos tramitado por FITT España y Portugal ha crecido sin detenerse, registrando un aumento de casi el 50%.

Gracias a las nuevas inversiones, las mangueras y los tubos de FITT podrán llegar en 48 o 72 horas desde el almacén de Zaragoza a cualquier punto de España o Portugal.

La ampliación y la modernización de la logística de la filial española forma parte de la visión global del Grupo: FITT dispone de centros de producción y logísticos de estratégicamente ubicados en toda Europa para garantizar la continuidad empresarial y el máximo nivel de servicio a grandes clientes, centrales de compras y clientes privados de comercio electrónico. Además, la logística está automatizada y estructurada para disminuir el impacto ambiental y las emisiones de CO2.