El sector de los Recursos Humanos se encuentra inmerso en una espiral de constantes cambios, como no puede ser de otra manera al tratarse de un ámbito que aborda las relaciones entre personas. Trivu, el ecosistema global que impulsa oportunidades para conectar, activar y potenciar talento joven con el objetivo de crear impacto real, nos cuenta cuáles son las tendencias que se imponen este 2020.

Innovar en la gestión y desarrollo del talento se ha convertido en un imperativo para las empresas, sustituyendo modelos clásicos de captación por estructuras más acordes con los tiempos actuales. En este sentido, el ecosistema de talento joven Trivu, ofrece en este inicio de 2020 las tendencias que empiezan a ser indispensables en los departamentos de Recursos Humanos, siendo la innovación la base sobre la que toda empresa debe pivotar como parte del ADN de la organización.

Entre las principales tendencias que empiezan a formar parte en la estructura estratégica de los departamentos de Recursos Humanos, destaca:

1. Digitalización: El avance de la tecnología es uno de los principales factores que convierten este proceso de transformación en una realidad. Gracias a la digitalización en el departamento de Recurso Humanos, es posible obtener y analizar los datos que optimicen las estrategias de gestión y planes de actuación necesarios para tomar decisiones de manera más efectiva, además de maximizar el rendimiento de sus empleados y parámetros clave para decidir a la hora de detectar el talento más adecuado para cada puesto de trabajo.

2. Gamificación: se trata de implantar planes formativos o de comunicación internos con el objetivo de dar a conocer algo de forma motivadora y sencilla para que su aplicación resulte todo un éxito. A través de mecánicas de juego en las relaciones entre empresa y empleados, se puede identificar al candidato ideal y aumentar la eficiencia del proceso de incorporación.

3. Employee Experience: o experiencia del empleado. Consiste en analizar el compromiso y las preferencias de los empleados, que influyen directamente a la hora de decantarse por una empresa u otra. Factores como el trato recibido o el ambiente laboral afectan a la actitud, bienestar y comportamiento del trabajador en la empresa, clave a la hora de conseguir objetivos, abordar nuevos retos y retener talento. Para ello, se fomentan los planes de carrera, los programas de bienestar, horarios flexibles y los sistemas de reconocimiento y recompensa, entre otros aspectos.

4. Contar con la ayuda de empresas especializadas: una de las tendencias que mayor impacto está teniendo, por su ayuda y efectividad a la hora de resolver los retos de transformación digital y cultural, consiste en acudir a empresas especializadas como Trivu, profesionales en detectar el talento y gestionar distintas experiencias como puntos de interés en el que converjan futuros candidatos para los procesos de selección. Y no solo eso, sino que acciones puntuales adaptadas a cada organización, realizadas por un tercero, son muchas veces la mejor manera de dinamizar el talento de las organizaciones a través de experiencias disruptivas que desde dentro no podrían hacerse nunca de la misma manera.

5. Gestión de equipo: es una realidad que, hoy en día, es vital el trabajo en equipo, lo que da lugar a la implantación de nuevos modelos organizativos para realizar trabajos de forma colaborativa, siendo capaces de conseguir resultados, coordinar tareas, resolver problemas o mejorar los procesos.

6. Gig economy: Consiste en la contratación de personas para proyectos o trabajos esporádicos de corta duración, que requieren personas con una cualificación específica para una labor concreta. Este tipo de colaboración ofrece a las empresas la ventaja de nutrirse y aprender de su experiencia.

Sobre este escenario, Kenza Bouzoubaa -Head of Strategy de Trivu-, defiende que “Los departamentos de RRHH no se pueden quedar atrás frente a la transformación del negocio. Que el talento es la palanca clave que marca el éxito de las organizaciones ya no es algo que se discuta. Por ello, todo en la empresa debe articularse de forma que los colaboradores se sientan escuchados e involucrados en el diseño y mejora de su propia experiencia.”