El verano ha llegado a toda España pisando fuerte, con temperaturas que superan los 35º grados en gran parte del país y en muchos casos, con unas semanas todavía por delante antes de las vacaciones. Es por eso que muchos nos preguntamos si es posible tener una piscina en nuestro ático, terraza o en la azotea del edificio, pues, nada mejor que contar con un lugar en el que refrescarnos al final del día sin necesidad de salir de casa.

Sin embargo, instalar una piscina en casa no es una cosa solo de espacio físico, sino que afecta a otros aspectos como a la cantidad de peso que puede soportar nuestra terraza y que tenemos que tener en cuenta antes de lanzarnos a colocar una piscina para refrescarnos. Por ello, los expertos de la plataforma digital para la mejora del hogar, habitissimo, ofrecen algunas recomendaciones a tener en cuenta si nos estamos planteando poner una piscina en casa.

En este sentido, en primer lugar, apuntan a la importancia de hacer una buena elección de los materiales. Y es que, existen múltiples opciones de hacernos con una piscina , ya sea de construcción, o instalándose solo en verano. Así, los expertos subrayan que los tres sistemas más utilizados para la construcción de piscinas en azoteas son el poliéster reforzado con fibra de vidrio, el acero inoxidable y el hormigón proyectado. En cuanto al poliéster reforzado con fibra de vidrio, los expertos explican que “es una opción muy rápida de instalar, aunque tiene limitaciones en cuanto a medidas y modelos. Además, requiere un mayor mantenimiento en comparación con otros materiales para piscinas.”

Otra buena opción son las piscinas de acero inoxidable, que cuentan con un mayor nivel de resistencia, con una perfecta estanqueidad y, en comparación con las piscinas de poliéster, presentan un mayor grado de libertad para el diseño. “Si nos decantamos por esta opción, es importante saber también que no necesitan un mantenimiento muy complicado, son ligeras y no se decoloran”, indican desde habitissimo.

Por otro lado, encontramos en el mercado las piscinas de hormigón proyectado, que se construyen mediante un sistema que consiste en la proyección a alta presión de hormigón que permite su adherencia sobre paredes y suelo, lo que posibilita que se puedan construir sobre cualquier superficie con alta resistencia. “Otra de sus ventajas es que nos permite ahorrar en el transporte de maquinaria a la obra y personal, además de tener una mayor estanqueidad e impermeabilidad, ambas necesarias para evitar fugas”, añaden.